ISLAS MALVINAS. Turismo, Historias de vida, Memoria

ISLAS MALVINAS. Turismo, Historias de vida, Memoria

Introducción

Me puse a pensar que no me va a alcanzar la vida para visitar todos los lugares del mundo que quiero conocer. Incluso, como dentro de algunos años se especula con que habrá viajes turísticos al Espacio Exterior, necesitaré varias vidas para explorar no solo el Infinito sino también el más allá, la Luna y el Planeta Marte.

Un capítulo aparte es la Antártida. Fantaseo con la posibilidad de estar en el continente más extremo, insondable, misterioso, recóndito e inaccesible del mundo. No sé, el hecho de que sea un lugar declarado de interés mundial para su conservación y que todas las naciones se hayan puesto de acuerdo en no “explotarlo” [1] me parece fascinante.

Por contexto me gustaría mucho agregar al itinerario antártico una visita a Tierra del Fuego y a las Islas Malvinas. En relación a éstas últimas podría decir que las conozco un poquito, más no sea imaginariamente, a partir de charlas mantenidas con amigos.

Geolocalización

Las Islas Malvinas poseen una superficie de 11.718 km2 y se componen de dos islas principales, Soledad y Gran Malvina, además de unos 200 islotes más pequeños. Están situadas en el Mar Argentino a unos 600 km aproximadamente de la costa patagónica[2]. La distancia es más o menos como viajar desde Córdoba Capital a la ciudad de Mendoza, un viaje en auto de unas 8 horas. Realmente, físicamente hablando, las Malvinas están muy, muy cerca.

La capital actual de las Islas Malvinas es Puerto Stanley, su centro urbano más importante, con museos que muestran el arte local y cuentan una parte de la historia -como toda historia contada- .

Su población está mayoritariamente compuesta por colonos y descendientes británicos, y en menor medida por personas provenientes de Francia y Sudamérica.

Según la Wikipedia, el estilo de vida refleja las costumbres de pequeñas comunidades rurales y urbanas del Reino Unido, aspecto que incide en una gastronomía basada en cordero, ternera, pescado, productos horneados como galletas y pasteles servidos con té; en los medios de comunicación: existe The Penguin News que es local, y emisoras de tv y radio con programaciones británicas; en las  celebraciones sociales: una vida comunitaria aparentemente activa, con clubes y organizaciones.

Empero, esta cultura también exhibe influencias de un pasado en conexión histórica con Sudamérica, como el uso de términos gauchescos[3]. Según la BBC de Londres, en las Islas se utilizan muchos vocablos en español asimilados naturalmente por los lugareños; lo curioso del artículo es que no profundiza en los fundamentos de éste hecho, si no que, simplemente, “sobrevuela” las causas y comienza a contar la historia de manera naif a partir de la “ocupación” (no usurpación) británica en 1833, como si no existiera un pasado anterior a los ingleses, como si el idioma español hubiera sido lanzado en paracaídas o transportado como semilla bajo el plumaje de aves migratorias.

Cuestión que algunas de las expresiones más utilizadas en español por los anglo parlantes son el “poocha che” o pucha che!, cuando algo no sale como se espera; también se usan habitualmente “montura”, “asado”, “vino”, así tal cual, los aperos del caballo también se hablan como en español “freno, recao, bozal, manea, cojinillo, cincha, sobrecincha”, así como los colores de su pelo, “zaino, manchao, ovejuno, gateao, tostao”; cualquiera de estos términos según la BBC, son designados en castellano y pronunciados por todos los kelpers [nombre que se les da a los isleños debido a las grandes algas marinas llamadas kelp -quelpo en español- que rodean las islas], así como por los dueños y administradores de estancias, de la misma forma que en la Argentina[4].

La Real Academia Española recomienda utilizar el gentilicio Malvinenses para referirnos a sus habitantes. Falklanders sería el correlativo en inglés. Pero la BBC los llama ligeramente Kelpers, que por lo que tengo entendido puede ser malinterpretado o tomado como un desprecio por los lugareños. Pero bueno, si lo dice la BBC de Londres….

Según Chequeado, la pesca es el principal recurso económico de las Islas. Al estar estratégicamente ubicadas entre el continente americano y la Antártida, la exploración tanto de especies acuáticas como del petróleo y otros recursos en su lecho marino, son difíciles de separar de la cuestión diplomática.

Es una de las razones que explican la anacrónica persistencia del Reino Unido de poseer territorios insulares y marítimos en el Atlántico Sur. Los productos pesqueros, las especies de calamar en particular, son por lejos el mayor bien exportado. Las Islas Malvinas se encuentran rodeadas por 4 cuencas marinas con potenciales recursos hidrocarburíferos a nivel comercial.

También se exportan lana y carne. El turismo es otra de las actividades clave de la región, pasando de 20 mil visitantes anuales en 2020 a 73 mil en 2024.[5]

Al momento de redactar este blog, existe una conexión aérea directa los días sábados, desde Punta Arenas en Chile hasta Mount Pleasant en Malvinas, un vuelo de 1 hora y media de duración[6] (esto no sería casual, entendemos que más allá de lo comercial, existen ciertos acuerdos entre Chile e Inglaterra por el dominio de la Patagonia). En teoría una vez al mes, este servicio hace escala en Río Gallegos para recoger pasajeros allí también[7]. Los argentinos, para poder ingresar a Malvinas, necesitamos pasaporte.

Por su parte, en época estival el Hemisferio Sur recibe barcos que votan desde el Hemisferio Norte por el cambio de estación, existiendo la posibilidad de llegar a Malvinas por mar en cruceros que, en su derrotero acuático, parten desde Buenos Aires y suelen llegar hasta Santiago de Chile o puertos aledaños.

El apreciado amigo Andrés Urrutia facilitó imágenes tomadas durante su último viaje a Malvinas. Con Andrés nos conocimos a partir de la articulación de viajes turísticos con Cepram, que es el Centro de Promoción al Adulto Mayor, un espacio inigualable en la Capital de Córdoba pensado para contener a los adultos mayores, promoviendo el acceso al conocimiento, el ejercicio de la memoria y diferentes saberes. Nunca vi tanta vitalidad junta como en ese lugar.

Algunos de los maravillosos instantes registrados por Andrés en Malvinas.

Fuente: Andrés Urrutia

Una guerra que aún cuesta entender

En el año 1982 y a los 12 años, la que suscribe portaba la bandera argentina durante los actos escolares, ya terminando mi 7mo grado en el Colegio Don Orione de Bº Sta. Isabel de Córdoba Capital. En paralelo, sin saberlo, un muchacho apenas más grande que yo, era llamado a cumplir con un deber militar inesperado. El Ejército Argentino lo convoca a defender la Patria en la Guerra de Malvinas contra Inglaterra.

De abril a junio de ese año, las autoridades del Colegio estuvieron informando novedades sobre la guerra. Yo no entendía nada ¿¿Guerra?? Nos decían que íbamos ganando. ¿¿Ganando qué?? Nos pedían donaciones a las familias para mandar al sur, chocolates -por el frío- y joyas de las abuelas -para reunir fondos-. Lo que recuerdo muy bien es que los niños les escribíamos cartas a los soldados, para darles ánimo, nos conmovía mucho la situación.

Ese muchacho apenas más grande que yo, que se fue a la guerra siendo un chico, hoy es mi amigo. Su nombre es Raúl Arias y lo conocí allá por el año 2008 a través de Malvinas por la Educación, una Fundación sin fines de lucro integrada por Veteranos de la Guerra de Malvinas. Él es quien comparte las siguientes fotos, es el chico señalado con una flecha en la primera imagen.

Fuente: Raúl Arias

La Fundación Malvinas por la Educación recaudaba fondos a través de una feria donde recibían artículos en donación como prendas, electrodomésticos, camas, alimentos, para luego ser vendidos. Con los fondos reunidos, los Veteranos hacían viajes a lugares donde el Estado no llegaba, llevando distintos tipos de contribuciones, en función de las necesidades puestas de manifiesto por comunidades del interior del país.

Apenas unos años atrás, el agua  potable en Córdoba era un recurso invaluable, el nuevo oro como le llaman hoy en día. Bueno en realidad lo sigue siendo. Recuerdo haber viajado con Veteranos a lugares remotos de la provincia donde me contaban que algunos padres, a veces, se veían obligados a hacer faltar a sus hijos a clases en las escuelitas rurales, ya que mientras ellos trabajaban muy duro todo el día, los niños debían cavar pozos para asegurarse encontrar agua, ya sea para consumo humano, de los animales, para riego e higienizarse. Si no encontraban agua, no había de dónde sacar!. Apenas unos 15 años atrás y a poco más de 100 km de la capital cordobesa.

También se hacían largas distancias hasta el Impenetrable Chaqueño, llevando contribuciones a las comunidades Wichi. Con Veteranos recordé lo que mis viejos me inculcaron desde chica: ¡pongamos la tapa para lavar los platos! ¡no derrochemos agua!.

Mi amigo Raúl es Radioaficionado, esto es, una persona autorizada y con licencia emitida por Enacom que, por iniciativa personal y sin fines de lucro, utiliza la radiotecnia para comunicarse, instruir y realizar estudios técnicos utilizando estaciones de radio propias en frecuencias y bandas específicas.

La actividad no solo implica el hobby de la comunicación a distancia, sino también la participación en actividades de ayuda comunitaria en situaciones de emergencias como inundaciones, incendios, accidentes, catástrofes naturales. Recordemos que “radio” es una de las regiones o rangos en los que se divide el espectro electromagnético, otras regiones son la luz visible (perceptible al ojo humano), rayos gamma, rayos x, ultravioleta, infrarrojo y microondas.

Por su insistente recomendación también me preparé y hoy soy una flamante Radioaficionada. Raúl siempre me decía: “¡Soldado Sánchez! Si un día nos quedamos sin internet, ¿cómo piensa mantenerse comunicada Ud. que siempre anda por la montaña?”

En el ánimo de construir memoria hay que entender que, en sí misma, es un fenómeno dinámico, nunca quieto, siempre sujeto a contextos.

Los silencios, los ruidos sociales, las políticas públicas o la ausencia de ellas, el confronte de intereses, los dolores, las alegrías, las negaciones, las afirmaciones, los delirios de algunos políticos, el desinterés social, la presión de los medios de comunicación, los procesos económicos, las presencias, pueden aportar tanto al recuerdo como al olvido, todos aspectos que influyen en la construcción de una memoria colectiva.

Como Veterano de Malvinas Raúl compartesushistorias. Sobre la guerra en particular y a través suyo pude corroborar que los soldados no recibían las ofrendas que les mandábamos en el año ´82. Les mentían sobre una guerra que estaba perdida, y les decían que íbamos ganando. Me habló del alma desgarrada ante la pérdida de sus compañeros, de estar tomando mates juntos y al rato no verles más la cara. Del frío que quebraba los huesos, de la falta de prendas y del equipamiento inadecuado. De los fusiles argentinos que a la par de los ingleses, parecían palillos. De las bombas y del ruido, que aún hoy lo despierta por las noches.

Raúl siente un orgullo genuino por haber estado en Malvinas. Pero su vuelta a casa no fue como lo imaginaba. Como casi todos los veteranos de guerra fueron olvidados, no reivindicados, sin retiros económicos justos ni obra social digna. El olvido de una sociedad duele y de manera brutal.


Mediante la Fundación sin fines de lucro, tanto Raúl como sus compañeros se ocuparon de construir memoria a partir de viajesa lugares donde se podía interactuar y colaborar con personas olvidadas -tal vez como ellos- llevando donaciones para los pueblos aborígenes, consiguiendo materiales y equipamientos para mejorar sus rutinas, ayudando a conservar sus lenguas nativas, gestionando lo que fuera necesario, poniendo de manifiesto enormes actos de amor!.

El promedio de sobrevida de un Veterano de Malvinas, en su momento, fueron los 50 años de edad. Quienes lograron sobrevivir, en muchos casos se debió a  que trataron de resignificar sus vidas, dar un sentido al día a día a través de la cooperación, conformando sus propios colectivos sociales. Aquellos que no lo lograron, fue quizás por el padecimiento de enfermedades terminales como cáncer, cirrosis, depresión y, en algunos casos, hasta por decisión propia.

“Raúl encontró una manera de transmutar el dolor y el olvido mediante la construcción de una memoria alimentada por actos amorosos. Para mí, Raúl es un alma de niño en un cuerpo de adulto, una persona que logró rescatarse a sí mismo. Y que seguramente siga trabajando en ello con gran valentía”.

Los argentinos solemos persistir en actitudes negacionistas respecto a lo que nos ha tocado vivir. No sé si por dolor, cobardía, o qué, parece que queremos huir de nuestro pasado. Pero, ineludiblemente, el pasado volverá a golpear nuestra puerta una y otra vez, para entrar sin esperar a ser atendido. En la medida que no lo aceptemos, no podremos transformarlo.

Porque en el año 1765 las Islas Malvinas fueron ocupadas por las autoridades del Virreinato del Río de la Plata -españolas-, luego de algunos sucesos diplomáticos y militares entre Francia, España y Gran Bretaña.

En la década de 1820 las autoridades argentinas con asiento en Buenos Aires, tomaron posesión de las Islas empleando el mismo principio que constituyó la Nación Argentina e incluso nombrando a Luis Vernet Gobernador de las islas el 10 de junio de 1829. El 3 de enero de 1833 las islas Malvinas fueron usurpadas por la corbeta británica Clio, quienes expulsaron a las autoridades argentinas vigentes.

Dicha situación se prolongó hasta el 2 de abril de 1982, año en que se dio inicio a la Operación Rosario, es decir la recuperación de las islas por fuerzas militares argentinas, dando inicio al Conflicto de Malvinas de 1982. El pabellón nacional flameó hasta el 14 de junio de 1982 en las islas, momento en el cual fueron nuevamente usurpadas por el Imperio Británico.[8]

Al final del artículo podés acceder a un Anexo con una tabla-resumen basada en información que recabé, donde detallo año por año los eventos ocurridos en torno a la posesión de Malvinas.


Dedicado a los Veteranos de la Guerra de Malvinas, con admiración.

Silvana Sánchez

-Guardiana del Bosque-


Anexo

AñoEvento
1690Falklands, 1er desembarco inglés
1764Malvinas, 1er asentamientos francés en la Isla Occidental
1770Francia pone fin a su asentamiento ante un posible reclamo español por la razón que vemos en el siguiente recuadro. El Virreinato del Río de la Plata se respalda en el Tratado de Tordesillas, que establece una línea de demarcación que reparte entre España y Portugal las tierras del “Nuevo Mundo”.
1774Crisis diplomática: como parte de un acuerdo, España acepta el regreso de una guarnición inglesa reducida, pero los británicos se retiran por motivos económicos. AQUÍ ESTÁ EL PUNTO CLAVE. Ocurre un acuerdo entre España e Inglaterra. España asegura que los británicos regresaron aceptando el dominio español, pero no se encuentra el convenio por escrito.
1810Revolución de Mayo, expulsión de España, Malvinas desocupadas.
1816Independencia Argentina. Entre sus objetivos está recuperar las Islas.
1820Se planta bandera argentina, en realidad en nombre de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Poco después un empresario, Luis Vernet, adquiere derechos para criar ganado y cazar lobos marinos. Establece convenios con algunos ingleses.
1829El empresario Vernet se convierte en el 1er comandante de la Isla nombrado por Buenos Aires. A partir de ello se genera un nuevo asentamiento y se establecen reglas para los pescadores extranjeros. Aquí entra en juego Estados Unidos.
1831Vernet acusa a Estados Unidos de no respetar las reglas y detiene 3 embarcaciones estadounidenses. Usa interpreta esto como un acto de piratería.
1832Usa se arroga la potestad de declarar el espacio marino libre de cualquier gobierno, aunque ni Buenos Aires ni Londres habían abandonado sus reclamos. Argentina nombra un gobernador.
1833Los ingleses regresan fundamentados en que no hay acuerdo por escrito, se agarran de eso. Gran Bretaña dice: nosotros llegamos primero. Argentina dice: pero ustedes aceptaron que las tierras eran españolas y nosotros nos independizamos y ahora son nuestras.
1845Los británicos fundaron Stanley, hasta hoy la capital del archipiélago, a lo que los argentinos llamamos Puerto Argentino.
1845 – 1982Argentina sigue reclamando por medios diplomáticos, sin éxito.
1982El 2 de abril Leopoldo Galtieri, quien dirigía la Junta Argentina del Gbno de Facto, la dictadura militar, ordenó recuperar las Islas por la fuerza, a sabiendas que la lucha sería tremendamente desigual. Margaret Tacher envió tropas. Tras 2 meses y medio de guerra, el saldo fue de 907 muertos, 649 argentinos, 255 británicos y 3 civiles isleños. Sin contar las muertes de veteranos por problemas de salud física y mental, postguerra. El 14 de junio fue el día del rendimiento argentino.
1994Reforma de la Constitución Argentina. Expresa en su Disposición Transitoria Primera que “la Nación Argentina ratifica su legítima e imprescriptible soberanía sobre las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes, por ser parte integrante del territorio nacional. La recuperación de dichos territorios y el ejercicio pleno de la soberanía, respetando el modo de vida de sus habitantes y conforme a los principios del Derecho Internacional, constituyen un objetivo permanente e irrenunciable del pueblo argentino.”
2013Un referéndum del gobierno en el archipiélago, arroja que el 99,8% votó a favor de ser británicos. Los votantes son descendientes implantados por ingleses.
2025Seguimos sosteniendo que las Malvinas son Argentinas.

[1] Cada vez que el humano se acerca a un elemento de la naturaleza que, desde la perspectiva humana, detecta una utilidad económica literal, lo explota, lo hace volar por los aires, lo dilapida, le asigna diversos aprovechamientos pero, en especial, la “concentración de la riqueza”.

[2] Argentina.gob.ar. Recuperado de: https://www.argentina.gob.ar/ejercito/malvinas

[3] Wikipedia

[4] BBC Mundo. Recuperado de BBC Mundo noticias:

[5] Chequeado. Recuperado de Chequeado.com: 

[6] Latam Airlines.

[7] Infobae.

[8] Argentina.gob.ar. Recuperado de: https://www.argentina.gob.ar/ejercito/malvinas 

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